En una decisión pública el Viernes por la tarde, el Juez del Distrito de los Estados Unidos Dolly Gee basado en el caso Flores vs Lynch, decidió como norma que los niños deben de ser liberados de la detención en cinco días hábiles y preferiblemente a sus padres, incluyendo los padres con los cuales fueron detenidos. La corte ordenó que esta nueva norma se ponga en efecto a partir del 23 de Octubre del 2015.
“El gobierno debe ahora tomar pasos inmediatos y dramáticos para terminar con la detención familiar” dijo Victor Nieblas Pradis, Presidente de la Asociación AILA por sus siglas en inglés. “Esta decisión reforzará nuestros esfuerzos de acabar con la práctica inhumana de deterner menores y sus madres” dijo Melissa Crow, Directora Legal del Concilio Americano de Inmigración. “La Corte ha castigado al gobierno por ‘innecesariamente arrastrar los pies’ en liberar a los menores de las detenciones familiares y por usar los mismos argumentos repetitivos en reuniones previas, que la corte ya rechazó. Juez Gee también se burló de las advertencias del gobierno de que la rápida liberación de los menores y sus madres podría estimular otra migración masiva de familias de Centro América, caracterizando éstas advertencias de ‘especulativas y peor aún de temor.’ La Corte otorga al gobierno cierto grado de extensión de los cinco-días límite “en casos de emergencia de una afluencia de menores dentro de los Estados Unidos” pero la decisión enfatiza que es sólo una excepción, no la regla.
Esta normativa reciente del caso Flores es la continuación de la decisión del 24 de Julio en la cual la Corte concluyó que el gobierno estaba en violación de los términos del acuerdo original Flores, el cual intentaba asegurar el cuidado apropiado de los niños cuando están bajo la custodia de inmigración. En Julio, la Corte ordenó al gobierno liberar a los niños que estaban sujetos bajo este acuerdo, y le dió al gobierno la oportunidad de responder a la Corte con una solución. La respuesta del gobierno quedó muy corta.